El próximo movimiento del BCE podría cambiar la economía de la Eurozona
La economía de la Eurozona depende del próximo movimiento del Banco Central Europeo (BCE), tras haber alcanzado el punto de inflexión entre la política monetaria flexible y la inflación. Los tipos de interés del BCE en el momento de escribir este artículo se sitúan en el 0 %, mientras que la inflación a nivel anual se disparó al 8,6 % en junio.
El banco central parece consciente de los riesgos y, por primera vez en 11 años, se inclina por una subida de los tipos de interés de entre el 0,25 y el 0,50 %. La reunión sobre política monetaria del BCE se celebrará mañana jueves 21 de julio.
El euro ha ganado terreno por la especulación de que el BCE se decidirá por un enfoque más agresivo de una subida de tipos del 0,5 %. No obstante, tiene un largo camino por recorrer tras varios meses de debilidad frente al dólar. Es razonable esperar que si el BCE no actúa con firmeza, los mercados de trading podrían perder la confianza y el euro podría sufrir otra caída.
Si el BCE pasa de un enfoque conciliador a uno agresivo, sólo queda el Banco de Japón (BoJ) enarbolando la bandera de la política monetaria conservadora de los países del G7. A menos, claro está, que el Banco de Japón dé una sorpresa en su decisión sobre los tipos de interés de julio: el banco central japonés se reúne el 21 de julio, el mismo día que el BCE. Los pares de divisas del JPY podrían moverse si hay algún cambio inesperado por parte del BoJ.
En otras noticias, el Reino Unido ha publicado esta mañana los datos del Índice de Precios al Consumo (IPC) de junio. Se esperaba que el índice de referencia subiera del 9,1 % al 9,3 %, pero el resultado final fue del 9,4 %. Esto puede crear expectativas de una nueva subida de tipos por parte del Banco de Inglaterra.
El Banco de Canadá publica hoy los últimos resultados del IPC de junio. Se espera que la inflación haya aumentado del 6,1 % al 6,7 % anual.
En cuanto a informes de resultados, el fabricante de coches ecológicos de gran capitalización Tesla publica hoy sus resultados del segundo trimestre. Sus acciones han sufrido considerables turbulencias a raíz de la polémica adquisición de Twitter por parte de Elon Musk, del que se ha hecho eco en los medios de comunicación. El revés por parte de China, que afecta directamente a la industria de producción de automóviles, tampoco ha ayudado. Además, el conflicto en Ucrania ha inflado los precios de las materias primas, lo que puede haber repercutido en dichos resultados.
Con estos reveses económicos y geopolíticos, los ingresos de Tesla de este último periodo se han visto mermados.
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